Comandante Antonio García

Mientras la paz anda embolatada, las madres con bajos recursos deambulan buscando los medicamentos que sus hijos enfermos necesitan, sufrimiento que nadie escucha ni aporta soluciones, ni reforma de salud que no llegó ni el gran sistema de salud que defienden los negociantes de ella.

Ese y otros tantos problemas son las razones de fondo que llevan a que la gente proteste para ser escuchada, pero la represión de las Fuerzas Armadas del Estado y la «mamadera de gallo» de gobernantes y poderosos conducen dichas protestas al alzamiento armado rebelde.

Ahora, igual acontece con los acuerdos de paz, los firman y luego se hacen «los cara de gallinas»: Ah… Ah… ¿Cuál acuerdo?

Para las élites en el poder y quienes los representan en el régimen político y el gobierno, las soluciones para la gente y los acuerdos de paz son un regateo permanente.

Hasta última hora del día 23 de agosto nada que se hizo público el Decreto Presidencial que retirara al ELN de la lista de los Gaos. El Gobierno sigue regateando, igual como lo hacen con los acuerdos que firman con las organizaciones sociales y los pobres de Colombia.

Quién podrá quedar con ganas de seguir firmando acuerdos, menos si las empresas de comunicación funcionales al poder del «billete» le siguen el juego al Gobierno tratando de presionar para que el ELN se sienta acorralado y se mueva o ceda.

El ELN le sigue apostando a un proceso de paz que conduzca a Colombia a las transformaciones que la hagan más democrática, justa e incluyente. Si los gobiernos cumplen los acuerdos firmados tendrán en el ELN un interlocutor para continuar las conversaciones.

Tomado De:

LA PAZ EMBOLATADA

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *